La Economía Europea en Declibe este año 2025

Europa enfrenta un panorama complicado, caracterizado por un estancamiento económico persistente y una creciente fragilidad política en países clave como Francia y Alemania. Según las proyecciones, ninguna economía europea figurará entre las 10 más grandes del mundo en 2050, un reflejo del declive de su influencia global.

Detrás la bandera europea y delante un billete de 20 euros

Factores como la guerra en Ucrania, la competencia económica de potencias emergentes y el posible regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, con amenazas de imponer aranceles a las industrias europeas, agravan la situación. Estas dinámicas podrían desencadenar una guerra comercial que afectaría gravemente a los exportadores del continente.

Europa: una encrucijada entre su modelo de bienestar y la realidad económica

El diplomático español Jorge Dezcallar de Mazarredo, en su libro "El fin de una era. Ucrania: la guerra que lo acelera todo", destaca que Europa está en decadencia. Aunque sigue siendo un referente global en sanidad, educación y calidad de vida, mantener este modelo resulta insostenible en un contexto de pérdida de competitividad y envejecimiento demográfico.

Europa representa solo el 6% de la población mundial, pero concentra el 50% del gasto social global. Este desequilibrio, sumado a un crecimiento económico proyectado de apenas el 0,9% en 2024, pone en evidencia la urgencia de reformas estructurales.

Reformas necesarias para evitar el colapso

Los expertos coinciden en que Europa debe ampliar su capacidad militar, reconfigurar su sistema energético, fortalecer su industria tecnológica y redefinir su política exterior frente a Rusia y China. Sin embargo, la fragmentación política y el auge de partidos populistas dificultan la implementación de estas medidas.

Además, la falta de una política común en áreas clave como la defensa, la energía y la migración limita la capacidad del continente para responder de manera unificada a los desafíos globales.

Un nuevo orden geopolítico

El conflicto en Ucrania simboliza un cambio en la geopolítica mundial, con el declive de Occidente y el ascenso del sur global. Este reordenamiento cuestiona el dominio establecido por las potencias vencedoras de la Segunda Guerra Mundial, como Estados Unidos y Europa, mientras países como China e India ganan protagonismo.

A la izquierda Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania. A la derecha Joe Biden, presidente de Estados Unidos

La llegada de Trump podría intensificar las tensiones transatlánticas, debilitando aún más a Europa. Si Estados Unidos reduce su apoyo a la OTAN o impone restricciones comerciales, Europa enfrentará una mayor presión para fortalecer su autonomía estratégica.

Conclusión: más unión o más decadencia

La única vía para que Europa mantenga su relevancia global es avanzar hacia una mayor integración. Como señala Dezcallar, “Cuanto menos Europa haya, menos influencia mundial tendremos y más deprisa se acelerará nuestra decadencia”. El futuro del continente dependerá de su capacidad para adaptarse a un mundo en constante cambio y de su voluntad para tomar decisiones audaces que aseguren su sostenibilidad económica y política.